Moto eléctrica.

El RACC prevé que 21.000 motos eléctricas circularán por Barcelona en el 2014
Barcelona es una de las capitales europeas con mayor número de motocicletas circulando por sus calles: en 2007 había registrados 266.001 vehículos de dos ruedas a motor en la ciudad, y se estima que 55.000 motos más circulan provenientes de los municipios del Área Metropolitana. Más del 80% de estos motoristas utilizan su vehículo diariamente, en recorridos que no superan los 40 kilómetros al día. De hecho, el 89% de los desplazamientos se circunscriben a la ciudad y las rondas de Barcelona.

Los datos los facilita el RACC, que acaba de presentar un estudio sobre el potencial de las motos eléctricas en Barcelona. En función de las cifras de venta actuales y de las respuestas de la encuesta realizada, el RACC estima que 21.000 motos eléctricas podrían estar circulando por la capital catalana en 2014.

La lenta transición
En la actualidad, los vehículos eléctricos (coches y motos) deben superar una serie de barreras para su plena implantación, y durante mucho tiempo convivirán aún con los motores de combustión interna. Según el RACC, la transición hacia una movilidad eléctrica total será lenta por los retos tecnológicos que plantea:

Las baterías (coste y prestaciones).

La red de recarga.

Las mejoras de los vehículos actuales de combustión interna.

Sin embargo, los vehículos más preparados para iniciar una transición masiva en Barcelona son las motocicletas y ciclomotores, ya que su uso intensivo puede ayudar a acometer políticas favorables al cambio. De hecho, según el RACC la moto eléctrica ya es bastante competitiva en coste y prestaciones como para competir con la moto tradicional.

Superar los obstáculos
Sin embargo, el estudio del RACC indica un elevado desconocimiento por parte de los usuarios de las actuales prestaciones de los moto eléctricas: el 50% sabe que ya puede encontrar estos vehículos en el mercado, pero aún piensa que no se pueden equiparar en velocidad y aceleración a las motocicletas de gasolina. Otro problema es su precio: sólo un 37% de los encuestados estaría dispuesto a pagar un 10% más por una moto eléctrica.

Pero el mayor obstáculo sigue siendo la carga de las baterías, ya que prácticamente la mitad de los motoristas en Barcelona deja la moto en la calle durante la noche. Por este motivo, el RACC recomienda realizar un censo de parkings adaptados y subvenciones para instalaciones de enchufes en garajes para recarga privada, y el desarrollo prioritario de puntos públicos de carga en zonas de aparcamiento masivo de motos (universidades, centro de la ciudad, etc.).

Por otra parte, esta entidad también recomienda ayudas de tipo fiscal para impulsar las motos eléctricas, como por ejemplo una exención total de los impuestos de matriculación y circulación (actualmente hay una bonificación de compra del 20%, y del 75% del IVTM), y modificar la base del impuesto de circulación de CV fiscales a emisiones de CO2 y contaminantes como los NOx y partículas PM10.